Hoy ha tocado algo dulce. Es el cumpleaños de una amiga chocolateadicta y le he llevado una tarta como ésta a la oficina. Como la primera foto era un desastre, la he cambiado por una más reciente, del primer cumpleaños de mi sobrina, mucho más lucida.
En la receta original, que es de nuestra compañera Concha, el orden de los chocolates es abajo el negro, en medio con leche y el blanco arriba, pero yo prefiero un chocolate oscuro arriba porque me parece más fácil de decorar. Queda muy bonita con ralladura de chocolate blanco, o con adornos como los de la foto.
He tenido un sobresalto cuando me he dado cuenta de que había cambiado las proporciones de leche y nata, pero lo he solucionado añadiendo un sobre y medio más de cuajada a la mezcla, y convirtiendo la tarta en "casi-light".
Es una tarta fácil de hacer y no necesita horno, así que animaos!
Música recomendada: My blueberry nights b.s.o. (2007)
Ingredientes:
1/2 litro de leche
1 litro de nata
3 sobres de cuajada
150 g de chocolate blanco
150 g de chocolate con leche
150 g de chocolate negro
1 paquete de galletas maría y mantequilla para la base (unos 80 g)
Preparación:
Con thermomix:
Trituramos las galletas en el vaso bien seco unos segundos en velocidad 7. Añadimos la mantequilla en pomada por trocitos y mezclamos en velocidad 3-5 hasta que tenemos una masa más o menos compacta. Cubrimos con la mezcla el fondo de un molde desmontable de unos 28 cm y apretamos bien con una cuchara para compactar.
Enjuagamos el vaso y vertemos en él un tercio de la mezcla de leche y nata, un sobre de cuajada y los 150 g de chocolate blanco. Programamos 6 minutos, 80ºC, velocidad 3. Vertemos sobre la base de galletas ayudándonos de una cuchara (la mezcla cae sobre la cuchara y así se reparte suavemente) y dejamos enfriar. Hacemos lo mismo con los otros chocolates y refrigeramos la tarta unas horas (mejor para el día siguiente). Se puede meter en el congelador un rato para acelerar el proceso.
Justo antes de servir se adorna la tarta con fideos de chocolate, ralladura, lacasitos, etc.
Sin thermomix:
Machacamos las galletas envueltas en un paño con un rodillo y trituramos después con la batidora, añadiendo mantequilla en pomada hasta que se apelmace la mezcla. Forramos el fondo de un molde de unos 28 cm y aplastamos con una cuchara.
Mezclamos en un bol grande la leche, la nata y los sobres de cuajada. Calentamos un tercio de la mezcla con uno de los chocolates en un cazo y lo llevamos a ebullición. Cuando se haya fundido el chocolate lo vertemos sobre la base de galleta y dejamos enfriar. El proceso es el mismo con los otros dos chocolates. Al echar un chocolate sobre el anterior nos ayudamos de una cuchara para que se reparta uniformemente y no haga "cráteres". Enfriamos varias horas y decoramos justo antes de servir.
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